El 10 de septiembre se celebra el Día del Terapista Ocupacional. Se instituyó este día a partir de la realización -un 10 de septiembre de 1985- del 1er Congreso Argentino de Terapia Ocupacional.

Los antecedentes del desarrollo de esta actividad en nuestro país, se relacionan en gran parte con la creación, en el Centro de Rehabilitación del Lisiado de Buenos Aires, de un programa terapéutico en respuesta a la epidemia de poliomielitis de los años 1953 y 1956. Dicho programa fue el antecedente de la primera Escuela Nacional de Terapia Ocupacional argentina y latinoamericana fundada en Buenos Aires en noviembre de 1959.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define a la Terapia Ocupacional como el conjunto de técnicas, métodos y actuaciones que, a través de actividades aplicadas con fines terapéuticos, previene la enfermedad y mantiene la salud, favorece la restauración de la función, cumple las deficiencias incapacitantes y valora los supuestos del comportamiento y su significación profunda para conseguir la mayor independencia y reinserción posible del individuo en todos sus aspectos: laboral, mental, físico y social.